viernes, noviembre 22, 2024
Economía

Pandemia redujo robos en supermercados, pero no los detuvo

Aunque la pandemia de covid-19 redujo los robos en los establecimientos de grandes superficies, no los detuvo.

Así lo revela el Censo Nacional de Mermas realizado por la firma consultora We Team, con el apoyo de Sensormatic y divulgado por Fenalco.

El informe señala que, si bien durante el confinamiento los robos a supermercados se redujeron considerablemente, no fue lo suficiente para acabar con el fenómeno.

Según el Censo, todos los controles biosanitarios impulsaron un modelo “temporal” que complicó el accionar de las bandas y de los ladrones ocasionales.

Eso ayudó a minimizar el impacto de los robos, que el año pasado alcanzaron una cifra cercana a los 112 mil millones de pesos.

Merma por robos

Durante el año anterior el 20% de la merma (disminución del inventario) en almacenes y supermercados del país obedeció a la modalidad de robo.

Unos 38 mil millones corresponden a robos cometidos por funcionarios o empleados y 73 mil millones pertenecen a robo externo.

Cabe mencionar que en las dos modalidades hay participación de bandas dedicadas a este flagelo.

En el periodo enero- diciembre de 2020 se registraron 32.104 casos de robo en grandes superficies.

Esto representa una reducción de 78% frente al 2019 en condiciones normales.

Esta reducción, según el informe de Mermas, confirma la efectividad de medidas que solo pudieron ser tomadas en época de pandemia.

Como efecto colateral mejoraron la seguridad al interior de los comercios.

Adicionalmente, el informe registra que las bandas delincuenciales se vieron más expuestas.

Los controles cotidianos dificultaron su accionar, y no lograron encontrar medidas que les permitiera mantener un buen flujo de mercancías robadas.

El top de lo más robados

En esta edición del censo se amplió el top 10 a un top 15, para poder evidenciar con mayor claridad el comportamiento de los artículos más vulnerados.

Esta tabla permite ver cómo el fenómeno es consistente en artículos de baja protección, pero no desatiende a aquellos que son de buena reventa en mercados negros.

La lista la componen, golosinas en minigóndolas, licores, atún/enlatados, gaseosas, productos cárnicos, leches, granos y cuchillas de afeitar.

También incluye artículos de aseo personal, digitales (Electrónicos), galletería, droguería, carnes frías, ropa en general y carros HotWheel.

El retail disminuyó en 11% las toneladas de comida que se desperdiciaron.

Los desperdicios en Colombia mostraron una reducción en su participación del fenómeno de la merma operativa, pasando del 26% al 22%.

Comportamiento distinto

La pandemia, generó comportamientos distintos en el proceso de compra por parte de las cadenas, que buscaron optimizar al máximo dicho elemento.

El consumidor, al estar expuesto a varias restricciones, también contribuyó a minimizar el fenómeno, al cambiar sus hábitos de compra.

El retail disminuyó en 11% las toneladas que se desperdiciaron, siendo un resultado positivo, que ayuda a los indicadores de la organización y a generar menor desperdicio en el país.

El fenómeno se redujo en la comercialización, pero es posible que los hogares, con una sobre compra, pudieran generar mayor desperdicio.