El chavismo retomó este domingo el control de la Asamblea Nacional, único poder del Estado que estaba en manos de la oposición.
La victoria con más del 67% de votos y sin sus grandes rivales, que llamaron a la abstención, no acaba.
El bloqueo político no facilita la gobernabilidad de un país en una profunda crisis económica y objeto de sanciones.
La escasa participación del 31%, 40 puntos menos que en las legislativas de 2015, agrega una sombra al esperado triunfo.
El día 5 se instalará la nueva Asamblea y con ello seguramente también se pondrá en entredicho el papel de Juan Guaidó como líder opositor.
El 20 de enero, Joe Biden asume como nuevo presidente de Estados Unidos en lugar del beligerante Donald Trump, aliado de Guaidó.
Por lo tanto, habrá que ver cómo cambia la relación de Washington con Venezuela.
También con el comienzo de año se puede agravar aún más la crisis económica del país con el potencial impacto de la falta de diésel.