Mientras miles de aficionados disfrutaban de la final de la Europa entre Inglaterra e Italia en Londres, una científica de la OMS calificaba lo que estaba viendo en Wembley como “devastador”.
El domingo, 60.000 aficionados disfrutaron de la final en el estadio londinense -el 75% de la capacidad del lugar-.
Los miembros del público tuvieron que presentar evidencia de que estaban completamente vacunados o una prueba de antígenos negativa realizada durante las 48 horas previas a la final.
Los aficionados tenían que usar mascarillas en las áreas interiores del estadio, pero podían quitárselas al llegar a sus asientos.
Estímulo a la transmisión
La epidemióloga de la OMS Maria Van Kerkhove expresó su preocupación afirmando que el evento estimularía la transmisión de la covid-19, incluida la variante Delta.
“¿Se supone que debo estar disfrutando, viendo la transmisión que ocurre frente a mis ojos?”, tuiteó.
En sus redes Kerkhove dijo que “la pandemia de #COVID19 no se tomará un descanso esta noche”.
“La #DeltaVariant se aprovechará de las personas no vacunadas, en entornos abarrotados, sin mascarilla, gritando y cantando. Devastador”, anotó.
La epidemióloga líder de la OMS, hizo una inusual crítica desde dentro de la agencia de la ONU, que por lo general evita comentar las políticas de los Estados miembro.
Preocupación de Merkel
La canciller alemana, Angela Merkel, ya había expresado a principios de mes su preocupación.
La razón era que las grandes multitudes reunidas para los partidos de la Eurocopa en Londres pudieran acelerar la propagación de la covid.
Sin embargo, en ese momento el primer ministro británico, Boris Johnson, defendió la decisión de permitir la asistencia de más de 60.000 personas a la final.
Johnson afirmó que se estaba organizando de forma “cuidadosa y controlada, haciendo análisis de todos los que acuden”.
Según Johnson, las vacunas han creado un “muro de inmunidad considerable”.
Tras permitir la asistencia de decenas de miles de personas a Wembley, Reino Unido se prepara ahora para el fin de las restricciones impuestas por la pandemia.
La semana pasada, el director de emergencias de la organización, Michael Ryan, instó a los países a tener extrema precaución al levantar las restricciones para “no perder los logros obtenidos”.