En el marco del Día Internacional de Acción contra la Migraña se destaca la importancia de crear conciencia sobre una afección que afecta a millones de personas en todo el mundo. Esta jornada busca visibilizar una condición muchas veces subestimada, pero que tiene un profundo impacto en la calidad de vida de quienes la padecen.
Aunque comúnmente este malestar se asocia solo con un dolor de cabeza intenso, la migraña es en realidad una condición neurológica compleja que va mucho más allá del dolor y suele manifestarse desde la pubertad y afecta mayormente a personas entre los 35 y 45 años.
Un dato poco conocido es que la migraña puede tener un carácter hereditario. Organizaciones como la Mayo Clinic, National Institutes of Health (NIH), y American Migraine Foundation han publicado información que respalda la idea de que la migraña puede tener un componente hereditario y que si uno de los padres la padece, existe un mayor riesgo de que los hijos también la sufran. Aunque la genética no es el único factor, su contribución es significativa y puede ser un indicador temprano para estar atentos a los síntomas en familiares directos.
A pesar de su alta prevalencia, la migraña sigue siendo subdiagnosticada y malentendida. Muchas personas no buscan tratamiento porque creen que deben soportar el dolor o no reconocen que sus síntomas son parte de un trastorno más complejo. Esta falta de diagnóstico y atención adecuada no solo prolonga el sufrimiento, sino que también limita el acceso a tratamientos que podrían mejorar significativamente la calidad de vida de los pacientes.
Con el objetivo de ampliar el conocimiento en salud, desde NUEVA EPS consultamos al Dr. Joe Muñoz, médico neurólogo y especialista en cefaleas y epidemiología clínica del Hospital Universitario Mayor – Méderi. Quien desde su experiencia y valiosas perspectivas aportará una contribución clave para comprender mejor el tema de la migraña.
¿Cuáles son los tratamientos más efectivos para el manejo de la migraña y cómo elegir el adecuado según cada paciente?
Dr. Joe Muñoz: “La efectividad del tratamiento para la migraña depende en gran medida del perfil individual de cada paciente. Factores como el peso, el sueño y la condición física influyen en la elección del tratamiento adecuado. Por ejemplo, un paciente con sobrepeso o problemas de sueño puede requerir un enfoque diferente que otro con un estado físico saludable. Personalizar el tratamiento según estos factores mejora significativamente los resultados.”
¿Qué desencadenantes comunes pueden provocar migrañas y cómo pueden los pacientes identificarlos y evitarlos?
Dr. Joe Muñoz: “Los desencadenantes más frecuentes incluyen ciertos alimentos y el estado emocional del paciente. El estrés, la privación de sueño y malos hábitos como el sedentarismo también juegan un papel clave. Si un paciente tiene sobrepeso, no realiza ejercicio y no duerme bien, es más probable que experimente migrañas con mayor frecuencia e intensidad.”
¿Cómo afecta la migraña la calidad de vida a largo plazo y qué estrategias pueden implementarse para minimizar su impacto?
Dr. Joe Muñoz: “Aunque la migraña no es una enfermedad mortal, afecta gravemente la calidad de vida. El dolor intenso puede limitar la capacidad de las personas para desempeñar tareas laborales, interactuar socialmente y cumplir con sus roles en la sociedad. Esto reduce significativamente la productividad y el bienestar general.”
¿Qué papel juega la alimentación y el estilo de vida en la prevención y control de las migrañas?
Dr. Joe Muñoz: “Mantener una alimentación saludable es fundamental para el control de la migraña. Una dieta balanceada ayuda a mantener un peso adecuado, lo que a su vez mejora el sueño y reduce el estrés. Esto crea un círculo positivo donde buenos hábitos, como el ejercicio y un descanso adecuado, contribuyen a reducir la frecuencia e intensidad de los episodios de migraña.”