La Unión Europea está “furiosa” con AstraZeneca, uno de los productores de vacunas de la covid-19.
La tensión ha escalado después de que la farmacéutica anunciara que no podrá entregar la cantidad de dosis de vacunas que acordó con la UE.
El pasado viernes, la farmacéutica anglo-sueca anunció de forma repentina a la Comisión Europea (CE) que no podrá entregar inicialmente la cantidad de dosis prevista.
La UE obtendría un 60% menos de dosis que las prometidas para enero-marzo de 2021.
La UE firmó un acuerdo con AstraZeneca en agosto por la compra de 300 millones de dosis, con la opción de comprar 100 millones más.
Una cláusula de confidencialidad blinda a AstraZeneca para no publicar los detalles de su acuerdo con el bloque europeo.
La farmacéutica ha dicho que el contrato recogía que “hará el mayor esfuerzo” (“our best effort”) para entregar una cantidad determinada, un argumento que la UE ha criticado duramente.
Pese a esos retrasos anunciados para la UE, AstraZeneca sí espera entregar las dosis previstas para Reino Unido, lo que también generó controversia.
La comisaria de Salud de la UE exigió parte de las dosis que se producen en las plantas británicas, que no han sufrido problemas.
“En nuestro contrato no se especifica que ningún país o Reino Unido tenga prioridad porque firmó antes”, dijo.
“El principio de que quien primero llega, primero se lo queda, puede servir para la carnicería de barrio, pero no en un contrato”.