Chile promulgó una nueva ley de migraciones que facilitará las expulsiones administrativas de inmigrantes.
El presidente Sebastián Piñera dijo que “el principal objetivo es poner orden en nuestra casa a través de una política de migraciones ordenada, segura y regular”.
Con la anterior ley un extranjero podía llegar a Chile como turista y luego cambiar su situación a trabajador en el país.
Piñera señaló que la nueva ley permite que los extranjeros que quieran venir a Chile lo hagan diciendo la verdad respecto de sus intenciones”.
Además, la normativa “facilita las expulsiones administrativas de los migrantes que ingresan a Chile en forma ilegal”.
La norma se refiere al ingreso por pasos clandestino y sin validar sus antecedentes penales”.
“No queremos que ingresen a nuestro país el crimen organizado, el narcotráfico, el contrabando, el tráfico y trata de personas o aquellos que no respetan nuestras leyes”, agregó.
La norma se tramitó durante un período de ocho años y llegó al al Tribunal Constitucional que eliminó seis artículos.
La Coordinadora Nacional de Migrantes rechazó tajantemente la nueva ley.
La presidenta de la ONG Vanessa González dijo que se “va a generar un daño profundo”.
“No sólo para quienes hoy día están sujetas a una migración forzada en la región, sino para toda la población migrante que ya reside en el país”, señaló.