Los independientes, ciudadanos que presentaron su candidatura para participar en la Asamblea Nacional Constituyente de Chile, se quedaron con 48 de los 155 escaños.
Los dos partidos de oposición (centro-izquierda) ganaron 52 escaños y Vamos por Chile, que unificó a la centro-derecha, obtuvo 38 escaños.
Los independientes defienden temas desde el feminismo hasta medioambientales.
Por primera vez en unas elecciones se les permitió participar sin ser parte de ningún partido político tradicional.
Los pueblos indígenas se quedaron con 17 puestos asignados desde el principio.
La distribución será reorganizada tras el reconteo de votos, ya que se debe cumplir con la paridad de género.
Un tema que llamó la atención es que realmente participó poca gente.
El 43% del censo electoral votó, un porcentaje mucho menor al 51% que votó para convocar la Asamblea Constituyente.
Los 155 constituyentes tienen un plazo de máximo 12 meses para redactar la nueva Constitución.
Luego se hará un plebiscito ratificatorio, que tendrá voto obligatorio.
