En diciembre de 2019, desde Wuhan, China, un desconocido virus hacía presencia. El 6 de marzo del 2020, en Colombia, ya estaba circulando la enfermedad.
El 11 de marzo del mismo año, debido a los alarmantes niveles de propagación y gravedad, la Organización Mundial de la Salud declaraba el brote de covid-19 una pandemia global.
Diez días después de la llegada del virus a Colombia, el 16 de marzo del 2020, Barranquilla reportó su primer caso.
Hoy Barranquilla cuenta con un sistema de salud fortalecido, luego de adecuarse y adaptarse a los cambios que trajo consigo la pandemia.
Así lo confirmó Humberto Mendoza, secretario de Salud del Distrito, al indicar que “la capacidad instalada que nos deja el aprendizaje de la pandemia con más y mejores Unidades de Cuidados Intensivos para adultos, mayor capacidad de respuesta y capacidad instalada en nuestro centro de acopio de vacunas”.
Asimismo, Mendoza consideró que entre los logros más significativos de Barranquilla en cuanto al manejo de la pandemia es que “fuimos la ciudad que más vacunas aplicó contra el covid-19 en Colombia”.
Agregó, además, que “este trabajo de ciudad, liderado por el señor alcalde Jaime Pumarejo en acompañamiento de todas las fuerzas y actores claves, hoy nos permite insistir: Hay que estar al día con todas las vacunas para seguir protegiéndonos”.
Hechos destacados
El primer y gran desafío al que se enfrentó la ciudad fue el diagnóstico mediante las pruebas que detectaban el covid -19.
Barranquilla pasó de tener un laboratorio de procesamiento para detectar la enfermedad a cargo del Instituto Nacional de Salud (INS) a tener 13 laboratorios locales y 46 laboratorios a nivel nacional que reciben muestras de barranquilleros.
Con el propósito de proteger y salvar vidas, se solicitó apoyo del Gobierno nacional, a organizaciones no gubernamentales y al Gobierno de Emiratos Árabes.
Gracias a estas ayudas, Barranquilla logró robustecer su sistema de salud, crear nuevos modelos de atención, enfoques predictivos y epidemiológicos tempranos, así como la capacidad de reacción ante los desafíos en salud pública que se presenten.
De esta manera, la ciudad enfrentó los desafíos de las circunstancias en tiempos de incertidumbre. Especialistas en salud, expertos científicos, sector público, sector privado y la ciudadanía trabajó en conjunto para dejar grandes lecciones de autocuidado y responsabilidad.
De igual forma, las clínicas, hospitales, los PASO, los CAMINO, demás centros de salud y el talento humano estaban a disposición de atender, recibir y apoyar a los ciudadanos.
Fue así como la capital del Atlántico logró ser la ciudad con mayor número de procesamientos de pruebas PCR en el país por cada 100.000 habitantes.
El miércoles 17 de febrero del año 2021, unos 11 meses después de estar atendiendo los desafíos que día a día presentaba el virus del covid-19, llegaron a Barranquilla las primeras vacunas contra la enfermedad. Hoy, más de dos años después del acontecimiento, la radiografía de la ciudad está así:
A corte 21 de febrero de 2023 se han aplicado: 2.988.572 dosis en total, de las cuales 1.234.489 corresponden a primeras dosis, 1.004.185 a segundas dosis, 178.087 dosis únicas, 486.678 terceras dosis (refuerzo) y 85.133 cuarta dosis (segundo refuerzo).
Importantes resultados
Barranquilla incrementó en un 77 % las UCI-adulto al pasar de 411 a 728 camas, lo que le permitió ser una ciudad resolutiva y suficiente en la emergencia sanitaria.
Este aumento de la capacidad de UCI fue un hecho histórico para la ciudad que, en menos de seis meses, trabajó, gestionó y mejoró la infraestructura para la atención de alta complejidad hospitalaria, avance que se hubiese logrado en 30 años.
Asimismo, la ciudad fue escogida para realizar el estudio de seroprevalencia desarrollado por el INS, con el propósito de conocer un aproximado de ciudadanos afectados por covid-19, cuáles fueron los factores de riesgo y cuántos desarrollaron inmunidad ante el virus. En ese momento se alcanzaba un 60% de prevalencia, actualmente se estima que más del 95 % de la población tiene inmunidad natural y/o postvacunal.
Barranquilla obtuvo 977.175 bienes e insumos médicos hospitalarios para el manejo y control de la emergencia, incluyendo ventiladores, dispositivos médicos, elementos de protección personal, insumos y demás herramientas que ayudaron a la capacidad de respuesta.
Además, fueron adquiridas seis nuevas ambulancias para ampliar y lograr respuestas más rápidas de la red, 4 de ellas de transporte básico y 2 medicalizadas.
Se fortaleció el Centro Regulador de Urgencias y Emergencias (CRUE) que permitió unificar el manejo de las remisiones a UCI, convirtiéndose en modelo regional y nacional.
La ciudad atendió en sus urgencias, servicios de hospitalización y unidades de cuidados intensivos a 4.683 pacientes procedentes de otras zonas del país, de los cuales, 3.687 correspondían al departamento del Atlántico, y 996 pacientes a otros departamentos de Colombia. Un total de 2.054 eran positivos para covid-19.
De esta manera, Barranquilla se convirtió en la ciudad con mayor capacidad instalada, y apoyó a otras ciudades del país durante los picos de contagios que estas presentaron.
Atención de la salud mental
En estos tres años desde el inicio de la pandemia, otra de las tareas fundamentales fue la atención de la salud mental, a lo cual Barranquilla le hizo frente mediante la estrategia: ‘Vacuna Emocional, ¡Hablemos!’, la cual inició desde diciembre de 2020.
Esta estrategia ha llegado a las cinco localidades de la ciudad, recorriendo centros comerciales, colegios, universidades, parques, escenarios deportivos, entre otros espacios de Barranquilla, priorizando sus servicios en niños, jóvenes y adolescentes, quienes regresaron a sus entornos sociales después de un período de confinamiento y sin presencialidad por el virus.
‘Hablemos’ ha estado en función de la atención de los barranquilleros, logrando cifras claves (más de 80.000 personas impactadas) frente a la acogida, especialmente en poblaciones que enfrentan duelos por pérdidas de seres queridos, a raíz de la pandemia. Así como población adolescente y jóvenes, familias, amas de casa y ciudadanía en general al vivir los confinamientos y regresar a las nuevas normalidades.
Panorama actual del covid-19
Los indicadores en Barranquilla están estables desde hace varios meses, donde los registros semanales tienen un comportamiento con casos mínimos, lamentablemente uno o dos decesos, e incluso semanas cero fallecidos.
En el último reporte del Ministerio de Salud, Barranquilla tiene 8 casos activos y 1 fallecido a causa del virus.
Los mínimos indicadores de fallecidos que se ven en los reportes están asociado a comorbilidades no controladas. Las edades extremas de la vida requieren mucho más control en las patologías como hipertensión arterial, diabetes, artritis, enfermedad pulmonar, enfermedad renal crónica, entre otras.
El cumplimiento con las dosis de refuerzo contra el covid-19 es fundamental, hay que aplicarlas, sumado a las medidas prevención y autocuidado para temporadas de brisas, de lluvias, o de cualquier variabilidad climática. Las personas no vacunadas están más expuestas a los virus respiratorios, incluido covid-19.
En Barranquilla, la red prestadora de las EPS continúan ofertando las pruebas PCR para diagnóstico covid -19, adicionalmente los muestreos y la Secretaría Distrital de salud sigue en vigilancia epidemiológica en toda la ciudad para cortar posibles cadenas de contagio de cualquier variante del virus que circule en Colombia.
Los usos hospitalarios con pacientes covid-19 hoy no superan el 1 % de la capacidad instalada en la ciudad.
El Distrito, reitera e insiste en las medidas de autocuidado con toda la ciudadanía. Las enseñanzas de lavado de manos como herramienta para prevenir enfermedades infecciosas no puede perder adherencia, el uso de tapabocas en sitios con aglomeraciones y para cualquier persona que tenga síntomas gripales es una recomendación útil y segura como protección individual, familiar y colectiva.
Recomendaciones de autocuidado
Todas las personas que tienen síntomas gripales se les recomienda usar tapabocas.
En sitios con aglomeraciones se recomienda usar el tapabocas, más aún a las poblaciones de riesgo.
Vacunar contra el covid-19 con las dosis de refuerzo y segundas dosis a los niños que aún están sin sus esquemas completos.
Lavarse bien las manos con abundante agua y jabón antes de comer, antes de preparar alimentos, después de ir al baño, después de cambiar un pañal o si ha estado en contacto con heces o vómito de una persona enferma o que se sospecha que lo está.
