el relanzamiento del Centro de Conciliación de la Universidad del Norte, adscrito al Consultorio Jurídico, la División de Derecho, Ciencia Política y Relaciones Internacionales rinde homenaje al legado profesional y académico del exdecano Luis Alberto Gómez Araújo (1954-2012).
La unidad administrativa desde ahora lleva su nombre y lo celebró el miércoles, 1 de marzo, mediante un conversatorio que resaltó la importancia de los mecanismos alternos de la solución de conflictos en los estudios del derecho.
Luis Alberto Gómez Araújo se desempeñó como decano de la División de Derecho y Ciencia Política, Relaciones Internacionales de Uninorte entre 1993 y 2004.
Se destacó por su visión en torno al potencial e importancia de las soluciones alternas para reducir la conflictividad social y la violencia, que llevaron al plan de estudios del programa académico y que distingue a nuestros egresados.
Durante el ejercicio de su profesión fue cofundador la Especialización Interdisciplinaria en Negociación y Manejo del conflicto.
Posicionó al Programa de Derecho en los primeros puestos de las pruebas Saber Pro durante varios años consecutivos y fue pionero en el proceso de su internacionalización, con la convicción de que las nuevas generaciones de juristas tienen que estar comprometidas con el fenómeno de la globalización.
Arquitecto de la identidad
“Luis Alberto fue arquitecto de la identidad de lo que es ser un abogada o abogado de Uninorte, trazó la ruta que se ha seguido para la búsqueda de soluciones conflictos, fue un líder en promover la conciliación, no solo como un servicio que se ofrece al público sino a todos los estudiantes de pregrado de la universidad”, expresó Alberto Madero, decano de la División de Derecho, Ciencia Política y Relaciones Internacionales.
El Centro de Conciliación de la Universidad del Norte permite el acceso a la solución y manejo de conflictos, mediante la conciliación a personas de escasos recursos económicos, con un servicio ágil y eficaz, sin necesidad de acudir al proceso judicial.
“El Consultorio Jurídico es un lugar de práctica para el derecho y una de sus finalidades es el aprendizaje de los estudiantes para que puedan poner en práctica todos los saberes, destrezas y conocimientos que han adquirido a lo largo de su carrera. Trabajan en procesos reales, prestan un servicio social a la comunidad y logran un mejor proceso de formación profesional con la guía de los docentes”, señaló Juan Barrero, director del Consultorio Jurídico.
Nuevos servicios de mediación penal
El Centro de conciliación busca proveer visiones alternativas a la justicia y tiene como estrategia ampliar la oferta de servicios judiciales en el Caribe colombiano, para garantizar el acceso a la resolución pacífica de conflictos a comerciales, civiles y de familia.
En ese sentido, a finales del 2022 se concretó un convenio con La Fiscalía General de la Nación que permite al Centro ofrecer, desde enero de este año, servicios de mediación penal, proceso de diálogo y negociación para la resolución de conflictos, y convirtiendo a Uninorte en la primera universidad privada y la segunda del país en hacerlo.
Además, la nueva Clínica Jurídica Consultorio a tu Barrio, que entró en operación en el primer semestre de 2022, ofrece todos los servicios del Consultorio Jurídico a comunidades vulnerables en los barrios y municipios del sur del departamento del Atlántico.
“Seguiremos construyendo sobre el legado de Luis Alberto para promover los mecanismos alternos de solución de conflictos y así contribuir a la disminución de la conflictividad social, reducir la violencia que tiene origen en las necesidades jurídicas insatisfechas y ofrecer una variedad de servicios de justicia que atiendan la conflictividad y las limitaciones que se viven en los territorios”, puntualizó Madero.
Importancia
Durante el coloquio, el director del Consultorio, Juan Barrero, y el decano dialogaron junto a los panelistas invitados: Juan Ramón De Páramo, director del Instituto de Resolución de Conflictos de la Universidad de Castilla-La Mancha de España; María De Jesús Illera, profesora investigadora en Uninorte y Juan Pablo Isaza, profesor e investigador del Departamento de Derecho, sobre cómo los procesos de conciliación deben ser aplicados en la sociedad y la responsabilidad de formar a futuras generaciones en este campo de estudio.
“Las culturas deberían empezar a incorporar en la estructura del derecho parte de la metodología de herramientas de conciliación y mediación, es decir, componer un proceso donde los sujetos involucrados del conflicto sean incorporados y los procesos más cooperativos en la solución de los problemas. Esto sería revolucionario en el actual diseño de la organización judicial y procesal”, indicó Barrero.
Por su parte, la profesora María destacó que la educación es el primer paso hacia la aplicación de los mecanismos alternos.
“Uno de los ideales principales del exdecano Gómez era que la sociedad conozca los diferentes procesos judiciales, que las personas y los futuros abogados le apuesten más a la conciliación. Ya existen herramientas normativas que posibilitan trabajar con estos mecanismos desde la práctica, la educación y la socialización. Debido a eso, considero que el abrir nuestros servicios hacia la medicación tendrá resultados exitosos, contribuyendo a la descongestión judicial”.