El gigante inmobiliario chino Evergrande entró en suspensión de pagos, anunció el jueves la agencia de calificación Fitch.
Según la agencia, Evergrande tiene una enorme deuda por lo que su salud financiera preocupa a los mercados
El 6 de noviembre, el grupo debería haber realizado un reembolso de 82,5 millones de dólares (73,1 millones de euros).
La inmobiliaria china tenía un periodo de gracia de un mes más, que terminó el martes.
El grupo se hunde bajo una deuda de unos 293.000 millones de dólares y se debate desde hace meses para honrar sus pagos de intereses y entregar apartamentos.
El problema es un endurecimiento reglamentario decretado el año pasado por Pekín en el sector inmobiliario para reducir el recurso al endeudamiento.
Desde entonces, Evergrande se quedó sin liquidez.
La precaria situación de Evergrande se explica también por las inversiones de todo tipo cuando sus finanzas lo permitían.
Esas inversiones fueron muchas con un alto riesgo en sectores como el turismo, ocio, digital, coche eléctrico.
El 6 de noviembre, el grupo habría tenido que pagar 82,5 millones de dólares. Dispuso de un período de gracia adicional de un mes, que terminó este martes.