De acuerdo con ACNUR, la falta de acceso a empleo, vivienda, educación y atención médica sigue siendo un problema para la población migrante y las comunidades de acogida. Según un informe de la Asamblea General de las Naciones Unidas, las mujeres representan casi la mitad de los 244 millones de migrantes y la mitad de los 19,6 millones de personas refugiadas del mundo.
La OIT estima que las mujeres migrantes tienen índices de participación en la fuerza laboral (72,7 por ciento) más elevados que las personas no migrantes (63,9 por ciento). Además, enfrentan mayores desafíos debido a su género y situación migratoria. De esta forma, el liderazgo en incidencia política y comunitaria se presenta como una herramienta clave para mejorar la situación de estas comunidades y promover el empoderamiento.
Es así como la Universidad del Norte y ONU Mujeres, con el apoyo de la Oficina de Población, Refugiados y Migrantes del Departamento de Estado de los Estados Unidos (PRM, por sus siglas en inglés) pusieron en marcha el Curso de Fortalecimiento de Capacidades de Incidencia Política, en el marco de la estrategia Más allá de las banderas somos mujeres que se desarrolla en Barranquilla, Soledad, Cartagena y Santa Marta.
A través de este curso, las mujeres fortalecen sus habilidades y capacidades para desarrollar una ciudadanía activa. Para ello, reflexionan sobre qué significa la ciudadanía y cuáles son sus dimensiones. Se avanza en la relación entre derechos y deberes, haciendo un recorrido por los mecanismos tanto formales como informales de participación, y tienen un acercamiento al significado y relevancia de la organización comunitaria.
Integración
“Esta formación es muy importante, ya que nos permite un diálogo en el que somos conscientes de los desafíos, inclusive transnacionales que enfrentan las mujeres y cómo el desarrollo de la ciudadanía activa no está relacionada solamente con mujeres colombianas, sino también con una participación más amplia que permita la integración de las mujeres venezolanas”, apunta Angélica Rodríguez, profesora e investigadora del departamento de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales de Uninorte, encargada de coordinar y dictar el curso en los distintos territorios.
La incidencia comunitaria de mujeres lideresas venezolanas y de comunidades de acogida en Colombia se refiere a la participación activa y organizada de estas mujeres en la promoción de sus derechos y en la defensa de sus intereses como población migrante. Su importancia radica en su capacidad para visibilizar las problemáticas que enfrentan y generar cambios positivos en su situación, promoviendo así su empoderamiento y el de su comunidad.
“Este curso nos ayuda principalmente a conocernos, a darnos cuenta de que somos muchas lideresas las que estamos trabajando en nuestras comunidades, a compartir nuestras realidades y plantear nuevas ideas” comenta Zuri Rodríguez, lideresa venezolana de Soledad (Atlántico).
Asimismo, la lideresa resalta la conformación de grupos informativos: “Estamos aquí para que, ante cualquier cosa que ocurra allá afuera, nosotras tengamos base propia de lo que aprendimos aquí. Por eso, la comunicación entre nosotras mismas es fundamental, porque lo que yo no sé, se lo puedo preguntar a otra lideresa y así creamos unión. Aprendemos una de la otra, ya que tenemos que estar informadas para informar”.
Herramientas
Este también ha sido el caso de Alfa Benítez, lideresa colombiana de Santa Marta, quien comparte que “gracias al conocimiento de este curso, puedo dar una información más clara y redirigir a las personas de mi comunidad directamente a los sitios donde les pueden asesorar y darles las herramientas para sus necesidades”.
Esta formación de 40 horas les permitirá a las lideresas certificarse en habilidades de incidencia política, al tiempo que reciben un acompañamiento en la formulación, ejecución, seguimiento y evaluación de un plan de incidencia que usarán para generar acciones que impacten en sus territorios, alcaldías y mecanismos de género.
Uno de los propósitos del curso es la promoción del acceso a servicios y derechos de las mujeres migrantes, retornadas y de las comunidades de acogida con el fin de prevenir y abordar de manera integral la violencia de género. La formación está compuesta por 6 sesiones que culminarán en el mes de abril, con la puesta en marcha de las acciones de incidencia de las mujeres venezolanas y colombianas.
El fortalecimiento de las habilidades de liderazgo e incidencia de las migrantes venezolanas y de comunidades de acogida es clave para hacerle frente a las necesidades que viven las mujeres en contextos migratorios en Colombia. En el Día Internacional de la Mujer, es importante reconocer el empoderamiento y liderazgo de estas mujeres, quienes inspiran y convocan a otras a involucrarse en la política y promover un cambio cultural hacia la igualdad de género en sus territorios.
