Una fiscal delegada ante los jueces especializados acusó formalmente al actual presidente de la Drummond Colombia, José Miguel Linares Martínez.
La investigación en su contra se debe a presunta financiación del paramilitarismo cuando fue funcionario de la multinacional.
La acusación también implica a Augusto Jiménez Mejía, quien fue presidente de la Drummond Colombia entre 1989 y 2013.
La Fiscalía acusó a los exdirectivos de incurrir en el delito de concierto para delinquir.
Habrían financiado y promovido al Frente Juan Andrés Álvarez del bloque Norte de las extintas AUC, a cambio de seguridad para su compañía.
Sostiene la Fiscalía que esas conductas tuvieron como propósito cometer punibles, como el homicidio.
Agrega que en forma sistemática y generalizada afectaron de manera grave la humanidad de la población.
En la misma resolución declaran como delito de lesa humanidad, las acciones criminales por ese bloque paramilitar.