El Gobierno tomó la decisión de darle un préstamo a Avianca por US$370 millones (algo así como $1,4 billones).
Este hará parte del proceso de reestructuración de la aerolínea en el marco de la Ley de Quiebras de EE.UU. a la que se acogió hace unos meses.
Estos fondos saldrán del Fome (Fondo de Mitigación de Emergencias).
La crítica principal contra esta decisión se centra en que Avianca es una aerolínea domiciliada en Panamá, no en Colombia.
Juan Fernando Cristo, exministro del Interior, dijo: “No hay plata para la renta básica de los pobres en Colombia y sí se gastan un billón y medio de pesos para Avianca”.
Agregó que es “pésimo negocio. No generan nuevos empleos y no se conocen garantías de la empresa. ¿Y para la competencia habrá igual tratamiento?”.
El Ministerio de Hacienda sacó un comunicado defendiendo la decisión.
Allí se explicó que una mala situación de Avianca tendría “repercusiones negativas en la calidad del servicio aéreo, en la economía y en la competitividad”.
El MinHacienda argumenta que la operación de Avianca representa $14,6 billones para la economía colombiana.
El ministro Carrasquilla fue citado a un debate de control político en el Senado por este préstamo.
Avianca también sacó un comunicado de agradecimiento. “Expresamos nuestro agradecimiento por la confianza y el apoyo que este crédito demuestra”, aseguró la empresa.
Avianca genera 21.000 empleos, más o menos, de los cuales 11.000 son empleos directos en Colombia, así como 6.000 indirectos.
