Cuatro días después de los terremotos en Turquía, que también golpearon a Siria, la calificadora de riesgo Fitch Ratings reveló que los daños vinculados a la emergencia por los movimientos telúricos serían de por lo menos 2.000 millones de dólares.
Fitch Ratings destaca que la seguidilla de réplicas ha acrecentado los daños por lo que los daños pueden llegar o incluso superar los 4.000 millones de dólares.
La calificadora de riesgo asegura que ambos países deberán enfrentarse no solo a una “tragedia humana” sino también a “pérdidas económicas difíciles de estimar, porque la situación está cambiando” constantemente.
La gravedad de estas cifras es que, según la agencia calificadora de riesgo, los recursos que en Turquía tienen seguro para este tipo de situaciones son mucho más bajos por “la baja cobertura de seguros en las regiones afectadas”.
