Fedesarrollo anunció que las pérdidas económicas que le ha dejado el país están entre 4,8 y 6,1 billones de pesos.
El cálculo lo sacaron tomando como referencia el paro de transportadores de 2016, el nivel de abastecimiento de los centros mayoristas y la demanda de energía no regulada.
Fedesarrollo encontró el que desabastecimiento aumentó 19,3% (vs mayo de 2019) en la presente coyuntura.
Esto es un efecto 50% superior al desabastecimiento registrado en 2016.
La demanda de energía no regulada tuvo una contracción de 6,3% en 2016, pero esta vez fue de 10,1%.
A partir de estas cifras, según explicó Luis Fernando Mejía, director de la institución, se explica que el impacto económico de este paro sea 1,5 veces más alto que el del 2016.
Esto se suma al impacto de los sectores de construcción, minería, suministro de energía y las actividades de entretenimiento.
A pesar de esta situación, Fedesarrollo pronostica un crecimiento de 4,8% en el PIB este año.
