La gobernadora del Atlántico, Elsa Noguera, anunció que ya habilitó el paso provisional para carros livianos en la antigua vía a Puerto Colombia, a la altura del Lago del Cisne, luego de que la administración departamental ejecutara obras para solucionar las afectaciones en el pavimento producidas por las fuertes lluvias en octubre de 2022.
“Estamos poniendo al servicio de la comunidad de Puerto Colombia, Barranquilla y todas las personas que utilizan la antigua vía a la altura del Lago del Cisne, un espacio que, luego de la ola invernal del año pasado, colapsó y quedó atrapado en la tierra, parecía un terremoto, se cayeron los postes de luz, tocó restablecer el servicio de energía, así como reparar una ruptura del tubo de gas, que fue intervenido rápidamente. Pero, no podíamos avanzar con obras por la cantidad de agua que cayó sobre la ladera y produjo una remoción de masa que colapsó esta zona”, explicó la mandataria.
Noguera agregó que “se intervinieron 100 metros lineales, que quedan habilitados para la comunidad, así como dos box coulverts que se construyeron un poco más arriba, a la altura del arroyo León, y también se hizo una intervención en el puente del Caujaral. Sin embargo, las obras no paran; recordemos que tenemos de manera provisional los big bags rellenos de arena y, al final, se van a instalar unos pilotes para poder garantizar a futuro la estabilidad de la ladera”, afirmó.
La mandataria destacó que restablecer esta vía “fue todo un desafío porque al lado están los mangles, que están en vía de extinción en el mundo, y teníamos que evitar que toda la arena que se deslizó llegara al Lago del Cisne, por eso, nos tocó esperar unos meses hasta que se estabilizara el sector”.
Seguridad de automotores
La secretaria de Infraestructura, Nury Logreira, explicó que la vía, que mantiene sus dos carriles, fue señalizada y limpiada totalmente, para la seguridad de los automotores livianos e hizo énfasis en que no se permitirá el paso de vehículos pesados y de carga.
“Desde que se presentó la emergencia, se hizo el cierre del corredor vial con acompañamiento del tránsito de Puerto Colombia, mientras que las empresas de servicios públicos realizaron labores de protección de su infraestructura y la posterior relocalización provisional, a pesar de que las lluvias persistían y el deslizamiento continuaba. Todo ello en aras de asegurar la continuidad en los servicios”, añadió.
Paralelo a estas actividades, funcionarios de la Corporación Ambiental del Atlántico (CRA) evaluaron el área afectada y emitieron un informe en el que se determinó que había un nivel riesgo bajo de inundación, erosión, incendios y sismos.
Asimismo, la CRA determinó que el área a intervenir coincidía con una franja protectora de manglar, pero las obras ejecutadas garantizaron la preservación de estos ecosistemas en el sitio.
Jairo Barranco, usuario de la vía, se mostró contento con la reapertura porque, aseguró, ahora tiene la tranquilidad de que ya está totalmente comunicado, sin dar tanta vuelta por vías alternas.
El secretario de Tránsito de Puerto Colombia, Juan Manuel Meza, indicó que “se tiene previsto un trabajo articulado con la Gobernación del Atlántico para realizar los estudios para la ubicación de los limitantes en alturas, para evitar el paso de vehículos pesados, y el Alcalde se comprometió a instalar unas cámaras para la detección de infracciones. De igual forma, tendremos unidades de tránsito en los diferentes puntos de acceso”.
¿Qué pasó?
José Lara Ruiz, ingeniero civil con especialización en geomecánica, explicó que en este punto, a finales de octubre de 2022, se presentó en el sector “un movimiento de masas complejo, debido a factores como los excesos de agua lluvia, caída en temporadas atípicas y por las condiciones de suelo problemático, precisamente, en condiciones de exceso de humedad, entre otros factores”, dijo.
Debido a esto, el experto señaló que se iniciaron las actividades de exploración del subsuelo, para recolectar las muestras que caractericen geotécnicamente estos tipos de suelo que constituyen la ladera.
“Esto se acompaña de estudios topográficos y morfológicos en el sector, para plantear una solución inicialmente de carácter temporal, que permitió mejorar la movilidad en el sector y con obras no profundas, pero medianamente seguras para los trabajos para la utilización de la vía, como para la parte superior de la ladera en la parte habitacional”, agregó.
¿Por qué no se intervino antes?
Lara explicó que estas actividades iniciaron una vez disminuyeron las lluvias, debido a que la remoción en la pata del talud fallado en época lluviosa podía “desencadenar nuevos movimientos”, que afectaría tanto la parte superior habitada, como la zona de la vía y el lago.
Actualmente, los estudios están en proceso y, una vez terminados, corresponderán a soluciones definitivas.