Fitch Ratings, una de las tres calificadoras de riesgo más importantes del mundo (con Standard and Poor’s y Moody’s) le quitó el grado de inversión a Colombia.
Esto significa que muchos inversionistas no es que no quieran, sino que no podrán poner su dinero en nuestro país, ya que nos vemos como un mercado riesgoso.
Esto repercute en que los intereses para futuros préstamos para la Nación también sean más caros.
Cuando un país pierde ‘oficialmente’ el grado de inversión es cuando dos de las tres calificadoras de riesgo lo quitan.
En mayo ya Standard and Poor’s nos lo había quitado.
La decisión de Fitch, igual que la de S&P se debe al aumento del déficit fiscal y la deuda pública, y a la incertidumbre sobre su evolución en el mediano plazo.
Todo enmarcado en el gasto en el que tuvo que incurrir el Gobierno por la pandemia.
Fitch también cambió la calificación del país. Pasó de BBB- a BB+ con perspectiva estable.
El ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo dijo que “la confianza de los mercados locales e internacionales se mantiene robusta”.
“Lo demuestran los $10 billones de inversión extranjera que han ingresado al mercado de deuda pública colombiano en los últimos tres meses”, aseguró.
