Al presidente Juan Manuel Santos le interceptaron su teléfono cuando fue fiscal Néstor Humberto Martínez.
La información en tal sentido la divulgó el portal lanuevaprensa.com.co que dirige el periodista Gonzalo Guillén.
La publicación de Guillén, que elaboró con Julián Martínez, dice que cuenta con la documentación que respalda la denuncia.
Agrega que las escuchas las hizo Luz Marina Tapia, Fiscal 03 de la Dirección de Fiscalías Antinarcóticos y Lavado de Activos.
La orden estuvo autorizada por el Juzgado Décimo Penal Municipal con Función de Control de Garantías y a instancias de un presunto agente de la DEA americana.
Para Guillén, el objeto principal fue el de mezclar de mala fe con el narcotráfico el proceso de paz con las Farc.
La operación incluyó la recepción de falsos testimonios para tratar de involucrar al vicepresidente de la época, el general Óscar Naranjo.
También al exministro Rafael Pardo Rueda, quien para entonces fuera Alto Consejero para el Postconflicto, los Derechos Humanos y la Seguridad.
A Santos, Naranjo y Pardo los intervinieron en el mismo proceso con el propósito de entregarlo a la justicia de Estados Unidos.
EL objetivo final eran las extradiciones por narcotráfico de alias Jesús Santrich e Iván Márquez, quienes debido a ello volvieron a las armas.
La interceptación a no menos de un teléfono asociado al entonces presidente Santos fue dispuesta el 14 de noviembre de 2017.
La intervención del teléfono se hizo bajo el pretexto de contribuir con “una investigación que adelanta la DEA en la ciudad de Nueva York”.