La Sección de Ausencia de Reconocimiento de la JEP dijo que hay 2.094 víctimas de desaparición forzada en los municipios antioqueños cercanos a Hidroituango.
El incremento de este crimen en los municipios de Briceño, Cáceres, Ituango Nechí, Peque, Sabanalarga, Tarazá, Toledo y Valdivia se dio desde 1996.
La JEP informó que solo desde el 2010 se comenzaron a reducir los números de desaparecidos.
Se comunicó que “el crimen fue masivo, generalizado y persistente” en dichos municipios, lo cual debilitó fuertemente a las comunidades.
La JEP encontró ocho cuerpos de personas no identificadas que tuvieron una muerte violenta por un arma de fuego y que parecen haber sido víctimas de desaparición forzada.
Estos cuerpos se suman a los 176 que ha exhumado la Fiscalía en la misma región durante los últimos años.
Estas desapariciones habrían sido ejecutadas por paramilitares, Bloque Mineros y Bloque Metro, los frentes 18, 36 y 5 de la extinta guerrilla de las Farc, y la fuerza pública.
